Necesitamos Calcio, No leche (parte 1)

¿Cómo saber qué lechada vegetal escoger y qué otros alimentos me aportan calcio que no sean de origen animal?

Una pregunta muy común en mis charlas y consulta es ¿qué lechada es la mejor? o ¿cuál es la más barata?, ¿cuáles son los riesgos de no llegar al aporte de calcio diario? y así un montón de preguntas. Trataré de ser muy sencilla al explicar y dar todas las recomendaciones posibles en dos partes.

Para entender el calcio es necesario que sepan algunas de sus funciones:

   a) Función Plástica: 99%
  • Huesos y dientes: función de sostén.
  • Fundamental para el crecimiento. 
  b) Función Reguladora: 1% (sangre, líquidos y tejidos blandos)
  • Mantiene el latido cardíaco.
  • Función sistema nervioso.
  • Facilita contracción muscular.
  • Mantiene funcionamiento de muchos enzimas.
  • Facilita secreción hormonas.
  • Mantiene la coagulación de la sangre.
Las recomendaciones de calcio van desde 200 a 1000 mg/día, en embarazo y lactancia entre 1200-1300 a veces hasta 1500 mg/día, dependiendo de cada persona.

Las enfermedades por falta de calcio son multifactoriales, como por ejemplo: la cantidad de hij@s, si realiza actividad física, si fuma o bebe alcohol, determinantes sociales, falta de vitamina D, vivir en lugares con poco sol (como el sur de Chile), trabajar de noche, etc. No es solo no tomar leche o no querer tomar leche, son todas las anteriores, así que ponga mucha atención en estos consejos.

Actualmente existen muchos alimentos que vienen fortificados (es decir, que le añadieron ciertos nutrientes) y que ayudan mucho a la población vegana/vegetariana a cubrir sus requerimientos, tanto de calcio, como otros nutrientes. El problema con estos productos es su elevado costo, hay personas que pueden acceder, pero una gran cantidad de personas no podemos solventar este gasto.
Lo primero es saber leer el etiquetado nutricional e identificar sus ingredientes:


Una vez que entiendan esta parte, podrán entender todo lo demás, y ojo, qué no le estoy haciendo propaganda a ninguna marca, solo es para que puedan identificarlas en el mercado.


La diferencia entre una y otra es el sabor y el aporte proteico principalmente (este será tema para más adelante) pero si ven estas leches o lechadas deben identificar en el etiquetado nutricional que diga el aporte de la vitamina -en este caso el CALCIO- y en qué cantidad por porción lo trae.
También hay lechada en polvo que vienen fortificadas y rinden 6 litros, lo importante, reitero, es que te fijes en el etiquetado nutricional y veas el aporte por porción.


Estas lechadas son baratas, ricas, pero no vienen fortificadas, y esto no quiere decir que no pueden usarlas, solo deben tener en cuenta cuáles son sus fuentes de calcio.

En la literatura científica y lo que he podido rescatar de mis pacientes y colegas, es que la edad de las personas que cambian su alimentación es entre 18 y 30 años –para que se entienda, es solo una mayor prevalencia a esta edad- A esta edad -admitámoslo- somos invencibles, somos unas criaturas casi héroes y poderosas donde nada nos pasará ¿sí o no? Hajhahjahja bueno, el fin último del post no es burlarme, solo quiero dejar en claro que debemos volver a reconsiderar nuestra salud, somos agentes del cambio que queremos ver, al menos a mí como profesional de la salud y vegan, me interesan 3 cosas: Los animales, nuestra salud y el medio ambiente. De esta forma gastamos menos dinero en salud más adelante o ¿creen que serán jóvenes para toda la vida? No creo en que se viva para siempre, pero sí dignamente y para luchar por l@s que no tienen voz u otras luchas, necesitamos un cuerpo, mente y espíritu sano y fuerte.

No te olvides de la segunda parte donde veremos otras fuentes de calcio sin la necesidad de explotar animales.

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