Hablar del Vegan Bunker es mucho más que hablar de rica comida, es el primer restaurant vegano con una declaración de principios, desde la puerta de entrada hasta las paredes del interior puedes leer, ver y sentir qué es el veganismo.

Partió en un pequeño local de Blanco Encalada y ahora ocupa una bella casona antigua del barrio Italia, un espacio más grande que les permite recibir cómodamente a más personas ¡Por estos días ya cumplen tres años!.

El Vegan Bunker es un espacio que habla por si solo, mientras disfrutas de la comida te acompañan bellos dibujos en las paredes, lucecitas que brillan y un ambiente muy acogedor, como bien dice su nombre es un verdadero bunker donde es muy grato refugiarse.


Lo que destaco del Bunker en cuanto a su propuesta de carta es que se ha ido renovando, se nota una preocupación por entregar lo mejor y por potenciar la creación en la cocina.

Si los visitas a la hora de almuerzo puedes comer el menú del día que incluye ensalada, plato de fondo y jugo, puedes revisar el menú en su facebook, en otros horarios también puedes ver su carta que incluye sandwiches, reposteria, postres y cafetería, el día de nuestra visita comimos completos, sandwich chacarero y Alí acompañados de papas fritas, además nos llevamos un pastelito para la casa y un queso Violife.



Siempre es una aventura pedir algo con glúten, ya que si no está bien preparado puede ser un fiasco, sin embargo en el Búnker van a la segura, el chacarero de glúten está muy bien preparado, pan frica, generoso en porotos verdes y una mayonesa de la casa muy rica.

El sandwich Alí es mi favorito: pan frica, zapallos italianos apanados, rúcula, hummus y mayonesa de la casa ¡Una delicia!

Si tienes suerte te puede saludar alguien con un maullido.





El Vegan Bunker se encuentra ubicado en  Fresia 529, esquina Tegualda en la comuna de Providencia.
Atiende de Martes a Viernes de 13:00 a 20:30 horas y el Sábado de 13:00 a 20:00 horas.
Solo aceptan Efectivo

Vi la noticia y ¡No lo podía creer! Queso veganos libre de explotación en una importante cadena de supermecados, un producto que es uno de los que más le cuesta dejar a los humanos cuando deciden dejar de utilizar al resto de los animales.

Es un hecho de que se nos facilitará la vida pero lo más relevante es ver como el mercado se abre a tener opciones que no signifiquen el uso de animales.
La revolución más pacífica de todas está tomando fuerza, una fuerza hermosa y poderosa.

Eco-Care se la está jugando e hizo algo que yo veía muy lejano pero que hoy es una realidad.

Corrimos al supermercado para comprar este queso Violife y preparamos una rica pizza.
¡Anímate y ponle las manos a la masa!

Siempre va a ser mejor hacer tu propia masa, es muy fácil y económico, necesitamos:
1/2 kilo de harina
1 sobre de levadura
4 cucharadas de aceite
agua y sal

Mezclamos los ingrediente y hacemos una salmuera (agua tibia y sal), la incorporamos hasta formar la masa, amasamos algunos minutos y la dejamos reposar tapada durante unos 30 minutos en un lugar lo más templado posible.

Después de este tiempo, dividimos nuestra masa, nos salieron 2 pizzas medianas, y comenzamos a estirarla para ir dando la forma, podemos girarla en el aire para que vaya quedando uniforme, la idea es que quede muy delgada, la pintamos con un poco de salsa de tomate y la llevamos al horno precalentado por unos 10 minutos y ya está, ahora vamos por los ingredientes que nos gusten.

El queso es fundamental para una pizza, en este tiempo hemos probado todo tipo de pizzas veganas con aciertos y decepciones grandes, algunas con muchos ingredientes y sin queso, a veces la masa muy alta o un queso de papa horrible, con quesos de frutos secos muy ricas pero lejanas al sabor del mozarella, así que vamos a usar muy pocos ingredientes para ver si realmente vale la pena el queso Violife.









A decir verdad Violife superó por lejos nuestra espectativa, si lo rayas se derrite perfectamente, de textura y sabor no tiene nada que envidiar a un queso de vaca, además de ser liviano para el estómago, pero lo mejor de todo es dejar de utilizar a los demás animales.
Encuentra los puntos de venta de quesos Violife en este enlace

Hace años mi pareja trabajaba moviéndose por muchos lugares de Santiago y como tenía que almorzar buscaba siempre encontrar lugares con opciones veganas.

Fue así como dentro de una galeria entre cafés, peluquerias, librerias y composturas de muñecas conoció al Soju y así como lo conocí yo y es que este restaurante destaca por sus variados platos diarios en el menu de almuerzo, económicos, abundantes, sabrosos y recetas veganizadas como carbonada, pastel de choclo, pastas, legumbres, arverjados, albondigas, charquicán, tomaticán entre muchos más, por si fuera poco tienen ensaladas a buen precio y tamaño, destacando la única y deliciosa ensalada Soju.


El Soju no es simplemente un local para almorzar y eso lo hace especial ya que despues de las 18:00 horas puedes comer otro tipo de preparaciones que los han hecho famosos, con mis amigas somos fanáticas de la chorrillana, es un gran plato de papas fritas, cebolla, tofu y glúten que te llena el estómago de sabrosura, los sandwich tambien son muy variados, grandes y ricos, además siempre están ampliando su carta ya que no temen innovar con nuevas creaciones.






Recomiendo el cebiche de tofu ¡Muy rico! harto limón, champiñones, cebolla y por supuesto mucho, pero mucho tofu.

El Restaurante Soju está ubicado en Merced 821 local 17, atiende de lunes a miércoles de 12:00 a 22:00 hrs. y jueves y viernes la cocina funciona hasta las 23:00 hrs.

¿Quién se resiste a pasar por una tostaduría y a no comprar maní? Yo debo entrar para envolverme en ese rico olor, salgo y camino hasta mi casa comiendo maní disfrutando de la libertad y recuperando energía.

Hoy les quiero compartir una nueva receta para disfrutar del sabor del maní en otro formato: leche.

El maní es en realidad una legumbre pero su aporte nutricional se compara con los que entrega la familia de los frutos secos, rico en proteína, minerales y vitaminas: hierro, calcio, magnesio, vitaminas del grupo B, solo por mencionar parte de su riqueza.

En cuatro sencillos pasos obtienes una leche ¡muy rica!

1. Remojar una taza de maní durante toda la noche
2. Meter a la juguera la taza de maní junto con un litro de agua
3. Licuar por unos minutos 
4. Agregar endulzante o azúcar, yo usé unas gototas de stevia

La verdad es que esta leche me gustó mucho, tiene un sabor muy especial y envolvente, 100% recomendada ¡que disfruten!